Ya han pasado casi dos meses desde que asistí al Fershop de Lima, pero he tenido que poco a poco asimilar y poner en practica todo lo aprendido. Solo son buenos recuerdos los que puedo tener del worskhop y las personas que conocí allí. Creo que para mi y para todos los compañeros asistentes ha sido un crecimiento fotográfico y personal muy grande. Poder aprender y acércate a las personas que admiras es algo que no se puede explicar si no lo vives en primera persona. Animo a las personas que no tengan claro si hacer esto es una buena inversión en su educación, que sin duda lo hagan con las personas que les inspiran y transmiten algo más que hacer fotos.
Quiero dar las gracias a las hermanas Luján, solo tengo palabras de cariño y agradecimiento por toda la organización.
Y a Fer por su paciencia infinita para resolver dudas, explicar y su manera de compartir todos sus conocimientos, y creo que lo mas importante, por hacernos ver que lo que nos hace únicos, es como vemos el mundo.
Gracias CABRÓN!